Saga Crepúsculo 4: Amanecer

Hace más de un mes que terminé este libro, pero entre mi pereza para escribir de las últimas semanas y otras opiniones que tenía pendientes no me he decidido a escribir esta opinión hasta hoy. El libro “Amanecer” da mucho juego por sí solo, pero además quería que esta opinión fuera mi particular homenaje a toda la saga “Crepúsculo”, cuatro libros que me han hecho disfrutar mucho y que me han descubierto otro tipo de literatura que hasta el momento no me atraía lo más mínimo y de la que ahora soy asidua (ya lo veréis en mis próximas opiniones). Si tuviera que hacer un resumen literario de este año, destacaría sin duda esta temática: el amor entre vampiros. También leo otros géneros, no es cuestión de estancarse en una cosa, pero este ha sido una gran novedad para mí.

Antes de seguir, quiero advertir que hablaré de aspectos de la trama y, por lo tanto, si no habéis leído el libro y pensáis hacerlo es mejor que paséis directamente a la conclusión, que no quiero chafarle la sorpresa a nadie. Pensaba hacer un apartado específico para los spoilers, pero en los apartados generales me era imposible hablar del argumento sin decir cosas que sonarán nuevas para quien aún esté por la primera o la segunda parte, así que finalmente he optado por llenarlo todo de spoilers. Avisados estáis.

El embarazo

Aquí tengo que hacer un apunte: antes de leer el libro ya sabía que Bella se quedaba embarazada, porque en la época en la que tenía clarísimo que esta saga no era para mí leí varios spoilers al respecto (para matarme, lo sé). También sabía que estaba embarazada de algo extraño, y aunque esto no lo sabía específicamente no fue difícil intuir que el bebé era de Edward y la mezcla de humana y vampiro era lo que hacía que la criatura no fuera normal. Pensaba que por esto perdería gran parte de la sorpresa del libro, por eso me alegré mucho al ver que el embarazo sólo corresponde a la primera mitad y, aun así, hay otras historias paralelas al mismo tiempo.

¿Qué opino sobre el embarazo? Poca opinión puedo tener al respecto porque, al saberlo de antemano, era un hecho que tenía asumido desde antes de empezar la saga. En parte me sorprende un poco que Edward, siendo tan responsable para todo, no pensara en usar preservativos o se informara antes de lo que podía ocurrir. También es raro que Alice no tuviera visiones hasta que la situación ya no tenía remedio. Pero no voy a quejarme: no me disgusta la explicación que da la autora, me la creo, y pienso que es una situación que da vidilla al libro y le aporta un giro interesante, básicamente porque de este modo la transformación no es como esperábamos y hay un nuevo personaje que despierta interés por sí mismo.

En cuanto a Renesmee (vaya tela con el nombre, aunque no sé si es peor este o el que le hubieran puesto de haber sido niño, ja, ja), mientras leía no podía dejar de pensar que si la serie continuaba habría algún libro narrado por ella. El hecho de que ya esté emparejada puede frenarlo un poco, pero precisamente porque su pareja no es de su clase podría haber problemas. Su poder no me disgusta, aunque me gusta mucho más el de su madre. En fin, es un personaje que está ahí y tiene su parte de interés, pero mientras en un libro sigan estando Edward y Bella, ella no tendrá mucho peso.

Volviendo al embarazo, me ha gustado mucho la perspectiva de las mujeres ante la maternidad. Me refiero obviamente a Bella, Rosalie y Leah. Me he quedado con las ganas de ver a algún Cullen volviéndose malo, pero no negaré que este lado de Rosalie me ha parecido muy bonito. Me gustaba ver el contraste entre ellas, que apoyaban el embarazo porque sabían que era la última oportunidad para Bella, y los hombres, que eran incapaces de ver la maternidad del mismo modo. Es un detalle que me ha gustado y que me ha ayudado a comprender mejor a Rosalie y Leah, y a que me caigan mejor ambas.

La transformación

Cuando se produce la transformación he tenido la impresión de que el libro era diferente a los otros en general. No necesariamente peor, pero se pierde la esencia de humana enamorada de vampiro de los primeros libros y, por mucho que siga habiendo acción para rato, el aura que desprenden las páginas no es igual. En realidad, es algo que llevo apreciando desde “Eclipse”, desde que se asume que no hay problema para que Bella y Edward sigan juntos (o, al menos, el problema no es que ella sea humana porque tiene claro que se quiere transformar). “Crepúsculo” y “Luna nueva” tenían un punto de inocencia y pureza que se pierde en los dos últimos, cuando la historia se vuelve más culebrón que nunca. Ya digo que tampoco lo veo mal porque era algo que tenía que pasar y, aunque sea un culebrón, me gusta, pero se nota que el tono de la narración es distinto.

Por otra parte, esto nunca lo he dicho, pero aborrezco que los vampiros sean todos tan bellos y espectaculares físicamente. No sé si esto se basa en la historia tradicional de vampiros o es una invención de la autora, pero sea lo que sea me parece un mensaje muy frívolo, en especial para el público estrella del libro, los adolescentes. Tampoco me voy a enfadar por esto porque lo sé desde el primer libro y, en el fondo, es un mal menor, pero como en esta opinión me estoy sincerando de todo sin preocuparme por los spoilers, lo digo. Básicamente no me gusta este mensaje porque Bella se pasa gran parte de la saga comparándose con Rosalie, Tanya y compañía y sintiéndose poco agraciada a su lado, y qué queréis que os diga, que la solución sea que Bella también se vuelva guapa no me gusta, por mucho que Edward deje claro que ella siempre ha sido una gran belleza. Habría preferido que Bella se quisiera más desde el principio, pero está visto que en este tipo de novelas las protagonistas son chicas inseguras que no se valoran hasta que un chico especial se fija en ellas.

Con respecto a la transformación de Bella en particular, me ha gustado mucho su poder y, sobre todo, esa capacidad que le ha permitido no tener que irse. En parte imaginaba que algo así tenía que pasar, porque el libro es muy largo y Bella y Edward perdidos por ahí no darían mucho juego. Los primeros capítulos de Bella como vampira se me han hecho un poco pesados, pero entiendo que eran necesarios para describir cómo se siente en su nuevo estado y ponernos en su lugar.

Parte de acción

Me refiero a la parte final, con todos los vampiros luchando contra los Vulturis. Vaya por delante que la idea me ha gustado, sabía que algo pasaría con los Vulturis pero no me imaginaba que la historia fuera así, y me ha parecido muy interesante conocer a otros vampiros y que éstos convivieran con los Cullen unos días. Pero como siempre, hay algunos “peros”. Es una historia de acción muy buena y adictiva, pero el desenlace me ha parecido facilón. Creo que la autora se saca una treta de la manga para no complicarse más, pero la trama que había planteado ofrecía más soluciones que, para mi gusto, daban más juego.

Para empezar, estaba cantado que Jasper y Alice no los habían abandonado y habían ido a buscar ayuda (no caerá la breva de que algún Cullen haga algo malo, no). Lo máximo que se me pasó por la cabeza era que se habían entregado a los Vulturis a cambio de que dejaran en paz a su familia, o para derrotarlos desde dentro. Pero eso de que con todos los vampiros dispuestos a luchar aparezca Alice con el otro medio humano medio vampiro, hablen con los Vulturis y todo se arregle, me parece facilón. ¿Era necesario reunirlos a todos solamente para hacer tiempo? Si en “Eclipse” se describía cómo mataban a los neófitos, no sé por qué aquí no ha habido un poco de lucha.

Es que, aun aceptando el final con la llegada de Alice con la solución, me cuesta creer que todos estén tan contentos. Al final ha quedado claro que ninguno traga a los Vulturis, pues a ver, ¡derrotadlos! Nunca lo han tenido mejor, con todos los vampiros reunidos y los otros deseando largarse porque ahora sí que tienen miedo. Me parece increíble que no aprovechen la oportunidad. Desde luego, si la saga sigue, espero que no intenten colarnos una escena igual, porque ahora está claro que los Vulturis irán con mucho más cuidado.

A propósito de los Vulturis, en mis opiniones de “Luna nueva” y “Eclipse” comenté que no me gustaban. Ahora tengo que cambiar de opinión: en esta novela tienen más peso, se habla más de ellos y, al fin, he podido quedarme con quién es quién y relacionarlos con sus poderes. Me alegra que esta vez me hayan parecido más interesantes, porque si no el libro se me habría hecho cuesta arriba seguro.

Hablando de los otros vampiros, no sé qué necesidad hay de explicar que a Tanya le gustaba Edward si al final por ese lado no ocurre nada. ¿Más inseguridad para Bella, eso es lo que se busca? No sé, no sé, en teoría la saga son cuatro libros y el quinto sería “Sol de medianoche” (“Crepúsculo” narrado desde el punto de vista de Edward), pero me da a mí que el final de “Amanecer” es muy abierto en todos los aspectos y la historia podría seguir. Tal vez con Edward y Bella como protagonistas no (y casi prefiero que así sea, porque si algún día la saga cae abajo que no sea con ellos dos), pero en Renesmee tienen una nueva protagonista en potencia. Por no hablar del hecho de que los Vulturis sigan en el poder con los dos Dráculas que les tienen ganas, etc. Historia y aventuras hay para rato.

Jacob

Me lo he dejado para el final expresamente. Mi querido Jacob, mi personaje preferido de la saga. No sabéis la alegría que tuve al ver una parte narrada exclusivamente por él, con lo claro que tenía al terminar “Eclipse” que no volvería a tener noticias suyas. Si la autora no termina “Sol de medianoche”, al final habrá habido más partes de Jacob que de Edward, ¡al menos el primero saldría ganando en algo!

Ni que decir que todo lo relativo a Jacob me ha parecido buenísimo. Él aporta acción y momentos divertidos en un punto en el que la historia estaba un poco descafeinada por el embarazo de Bella. El momento en el que Edward dice “Bella puede tener cachorros” me pareció hilarante. En fin, me encanta este personaje, pensaba que con Edward y Bella juntos de manera definitiva él no pintaría nada pero me equivocaba, y me alegro de que así fuera.

Un final con Jacob vagando como lobo lejos de Forks habría sido muy triste, aunque el final que le dan aquí tampoco es que me entusiasme. Reconozco que la idea no es mala “él ama a Bella, si no puede tenerla a ella, ¿a quién podría amar? A alguien que tenga algo de Bella”, pero en la práctica Renesmee es el premio de consolación, no nos engañemos. Además, se podrían haber ahorrado el momento en el que Edward se dirige a él como “hijo” (porque por mucho que la historia sea un culebrón, tela marinera con esto).

Además, la pareja Jacob-Renesmee tiene puntos poco claros. Los lobos y los vampiros no se tragan, y por mucho que ella sea mitad y mitad, hay algo que no me encaja. Una parte de Jacob tendría que sentir rechazo por ella, y lo mismo por parte de ella hacia él. No sé, no sé, con la imprimación lo justifican todo, pero si quieren aquí pueden tener una historia a la que darle vueltas cuando ella crezca.

Algunos momentos de la parte narrada por Jacob me han recordado a lo mejor de “Luna nueva” y de toda la saga para mí (cuando Jacob y Bella se conocen). Me refiero a la parte en que Jacob y Leah comparten pensamientos y se ven obligados a entenderse. No tragaba a Leah antes de leer este libro, pero aquí la he comprendido muy bien y me ha gustado encontrar un personaje femenino con más carácter que las vampiras y Bella. Habría preferido que Jacob acabara con ella, creo que pegan más y el hecho de que ambos hubieran pasado por cosas parecidas los habría unido. En fin, todo lo relativo a estos dos me ha parecido más realista y sentimental, son momentos que me han hecho sonreír como en “Luna nueva”.

¿Estoy contenta con lo que sucede con Jacob en “Amanecer”? Sí y no. Me gusta que haya una parte narrada por él, su amistad con Leah, su liderazgo y todos los momentos divertidos que aporta. Pero me parece hasta ofensivo que lo líen con la hija de su amada. Me he ido acostumbrando a ello, pero en su momento no me hizo ninguna gracia.

Otras impresiones

¿Alguien se cree que Charlie y René reaccionen así por la boda? ¿Y que Charlie se tome tan bien lo ocurrido con su hija? Creo que con todo esto la autora ha salido del paso como ha podido, pero no me parecen situaciones creíbles (dentro de lo irreal que es todo). Hay que reconocer que se estaba preparando el terreno desde el principio, no es casualidad que Bella se alejara de su madre para vivir con un padre que la deja ir más a lo suyo y no hace preguntas. Pero aun así He echado de menos algunos problemas, broncas. En fin, está visto que en esta saga, los que son buenos, son siempre comprensivos y nunca actúan mal.

En general, he tenido la impresión de que hay dos libros en uno. La primera parte, con la boda, es tan breve en comparación con lo que viene después que me parece más una extensión de “Eclipse” que algo de “Amanecer”. Al terminar el libro lo que te viene a la cabeza es el final con todos los vampiros reunidos y lo de Jacob-Renesmee, la boda y la luna de miel quedan muy atrás. La segunda parte es la de Jacob y el embarazo, y aquí sí que se empieza a notar que estás leyendo otro libro. Finalmente, Bella vampira. En cada parte he tenido la sensación de que la anterior quedaba muy atrás, el ritmo de los acontecimientos es tan rápido que me parece normal haberlo sentido así.

A pesar de los “fallos” que he podido describir en esta opinión, el libro me ha gustado y me ha dado pena terminarlo, a pesar de todo. Creo que cuando lo “malo” de un libro es que no te gusta cómo termina un personaje o cómo se desarrolla una trama en concreto, el fallo realmente no es grave, porque si te enfadas con lo sucedido es porque estabas muy metido en la historia y eso siempre es positivo en una novela. Por eso, que aunque parezca que estoy decepcionada por algunas cosas que he dicho, la realidad es que he disfrutado mucho del libro. Y no hace falta que diga que el estilo es muy ameno y no se me ha hecho pesado en ningún momento.

Preguntas y deseos

¿Habrá una quinta parte, diferente a la de “Sol de medianoche” de Edward? Podría haberla, hay acción para rato y en mi opinión el final de “Amanecer” no transmite tranquilidad aunque intenten transmitirnos lo contrario. Los Vulturis, con los rumanos y casi todos los vampiros en contra, lo tienen difícil para mantener su poder, y una escena de ellos siendo derrotados (con alguna posible rendición que implicara que el Vulturi en cuestión empezara a formar parte de los Cullen, por ejemplo) podría ser de lo mejorcito de esta saga.

El tema de Jacob, mi querido Jacob, también puede dar mucho de sí. Ahora parece que todo va bien con Renesmee, que ella también lo quiere, pero no olvidemos que su parte vampira está presente y quien sabe si cuando deje de crecer tendrá más peso que la parte humana y no reaccionará igual ante la imprimación de él. Si hay continuación, me parece casi una obligación que toquen este tema, porque no está claro y también porque necesitamos conocer a una Renesmee algo mayor (a ver si así me acaba gustando para Jacob).

Y, por supuesto, no me cansaré de pedir que haya división entre los Cullen y alguno haga algo malo. Es cierto que Rosalie me ha gustado más en esta parte, pero en mi interior también sentía que al nacer la niña tal vez le daba por quitársela a Bella y largarse con ella. A Jasper nunca lo he visto claro del todo, y no me gusta la pareja que hace con Alice. Ya que en los vampiros no hay imprimación, una ruptura no sería algo tan extraño, ¿no?

También estaría bien un libro desde la perspectiva de Jacob, más alejado de Bella y Edward y únicamente preocupado por Renesmee y la manada. ¿Se nota cuál es mi personaje preferido, eh? O una parte narrada por Renesmee, con menos protagonismo para sus padres. Creo que Bella y Edward tienen que terminar aquí, si la saga sigue, que sigan como secundarios o que los manden de vacaciones, pero complicar más su relación me parecería un error y podrían cargarse la magnífica historia que han creado. Con Renesmee, Jacob y los otros vampiros hay material de sobra por si algún día la autora se decide a seguir escribiendo, mejor que no toque más a la parejita, por su bien.

Una saga que me ha hecho disfrutar mucho

“Crepúsculo” me gustó, me enganchó mucho y sirvió para que entendiera que esta saga es, ante todo, una historia de amor. Aunque nunca me hubieran interesado los temas fantásticos, con esta serie no hay problema porque los vampiros no tienen nada que ver con la literatura de vampiros tradicional. Las escenas en el instituto y la manera en que Bella descubrió el secreto de los Cullen transmite mucha inocencia y pureza en comparación con todo lo que ha ocurrido después, recuerdo aquellas escenas con mucho cariño. La parte de acción con el malo malísimo James me parece la mejor de toda la serie, mejor incluso que la de “Amanecer”, porque esta me pilló por sorpresa y no tengo absolutamente ningún “pero” para ella.

“Luna nueva” me encantó y, al contrario que a la mayoría, me parece el mejor libro de la serie. La parte en que Bella y Jacob se van conociendo me pareció más realista que todo lo que había leído hasta entonces, y no eché de menos a Edward en ningún momento. La recta final me parece más floja, habría preferido que Bella no volviera a los brazos de Edward tan rápido y pasara un tiempo con otro, pero aun así lo sigo considerando el mejor.

“Eclipse”, también al contrario que la mayoría, me pareció el más flojo de todos. Hay mucha acción, y buena, pero el romance empieza a tener tintes de culebrón venezolano que mandan al traste la pureza que transmitían los libros hasta entonces. En algunos momentos Bella no se entiende ni a sí misma, pero el libro se salva porque la rivalidad entre los dos protagonistas masculinos da muchos momentos divertidos y la parte de acción es bastante entretenida. A pesar de parecerme el peor, me gustó y me dejó con ganas de saber qué ocurriría en la última parte.

“Amanecer” me ha gustado más que “Eclipse” pero menos que “Luna nueva”. Lo sitúo más o menos al mismo nivel que “Crepúsculo”, si eso un poco por encima de este (a “Crepúsculo” le di un 8 y a “Amanecer” un 8,5). Se puede decir que el libro sigue en la línea de “Eclipse”, en el sentido de que sigue el culebrón y la acción, pero afortunadamente la imaginación de la autora no se agota y ha sabido crear nuevas historias con éxito. Me ha dado pena terminarlo, con eso ya lo digo todo.

¿Qué es lo que tiene está saga para gustar tanto (y para ser tan odiada, pero la cuestión es que no deja indiferente)? Engancha como pocos autores consiguen enganchar; narra una historia con muchas posibilidades que hace que le des al coco y pienses en lo que sucederá (que Bella y Edward acabarían juntos era previsible, pero la manera de llegar a ese final y las otras tramas no); el amor de la parejita es terriblemente irreal pero al mismo tiempo terriblemente grande, y te llega; tiene mucha acción, lo que evita que tanto amor te acabe resultando empalagoso. Y podría seguir enumerando ventajas, pero con esta ya son cuatro mis opiniones sobre esta serie y creo que ya está todo dicho.

Entre las desventajas podría decir que la calidad literaria es inexistente, que los personajes son unos ñoños, que es una ofensa para los vampiros de siempre, etc. pero me temo que eso ya lo han dicho los muchos detractores de “Crepúsculo”, así que no me voy a repetir. El único problema que le veo yo (aparte del rebote que pillé con el final de “Eclipse”), es que causa adicción, no sólo a esta serie, sino a cualquier libro de temática similar. Con lo que me negaba yo a leer estas historias, ¡y ahora es lo que más me apetece!

Por último, quiero destacar un detalle que, aunque nunca se diga, me parece algo digno de mención: la inspiración en clásicos que tuvo la autora al escribir la serie. Así, “Crepúsculo” se inspira en “Orgullo y prejuicio”, “Luna nueva” en “Romeo y Julieta”, “Eclipse” en “Cumbres borrascosas” y “Amanecer” en “El sueño de una noche de verano”. “Crepúsculo” será todo lo malo que queráis literariamente, pero me parece un punto a su favor que se nombren clásicos en la saga y que la autora diga que se inspiró en ellos.

Conclusión

Ya está todo dicho. Esta saga, aunque no vaya a pasar a la historia de la literatura, me ha hecho disfrutar mucho y me ha dejado con ganas de seguir leyendo libros de este género (acepto recomendaciones). “Amanecer” en concreto, me ha parecido un buen final para la serie, aunque ya digo que si la autora quiere puede seguir estirando el hilo por muchos sitios. Me ha gustado que hubiera una parte dedicada a Jacob, mi personaje preferido, a pesar de que yo le habría dado otro final. La trama de Bella en la primera mitad da un giro interesante a la historia, un giro propio de culebrón, sí, pero entretenidísimo. Finalmente, la parte de acción no está nada mal, me gusta que la autora haya buscado algo “grande” para terminar el libro. Creo que podría haberlo arreglado mejor, pero el planteamiento está muy bien y sorprende.

¿Lo recomiendo o no? Si habéis empezado a leer la saga y os gusta, no hace falta que os diga que sí porque acabaréis leyendo “Amanecer” igualmente. A los que aún no sabéis si leer estos libros o no, si sois lectores muy exigentes o no os gustan las historias románticas, es mejor que os abstengáis, pero si buscáis una novela ligera y sin más pretensiones que entretener, “Crepúsculo” puede ser una buena opción para vosotros.