Hace pocas semanas me regalaron El coleccionista de relojes extraordinarios de Laura Gallego García, una muy reputada autora de literatura juvenil en España.
Contenido de la reseña
Buena trama, no tan buen desarrollo
Uno de los aspectos positivos de esta novela en concreto, es que la idea general de su argumento es buena. Trata sobre una familia estadounidense, compuesta por un padre con abundantes recursos económicos pero de educación bastante rudimentaria, su hijo Jonathan, al cual le fascina todo lo relacionado con España, y su nueva mujer Marjorie, que se convierte en la madrastra del chico. En un viaje que los tres emprenden a una hipotética ciudad española llamada la Ciudad Antigua, entran en un edificio llamado el Museo de los Relojes, cuya exposición fue clausurada al público años atrás.
En el interior del museo conocerán a un misterioso marqués que colecciona relojes de todas las clases. Por un desgraciado incidente, el alma de Marjorie queda atrapada en uno de los relojes del museo, y Jonathan tiene que partir a las entrañas de la Ciudad Antigua para buscar lo único que le puede devolver el alma a su madrastra: el maravilloso y desaparecido reloj Deveraux.
En sí, la idea de la trama es buena, eso lo reconozco, y si hubiera sido desarrollada con más amplitud y riqueza de detalles, quizás otra clase de ritmo narrativo, me habría gustado mucho más de lo que me ha gustado.
Entiéndase, el libro se desarrolla con una acción si no trepidante, por lo menos bastante ágil, no se detiene en detalles descriptivos, se centra en lo que es la historia, sin dar demasiados rodeos… pero supongo que no es el estilo que me viene a la cabeza cuando pienso en Laura Gallego y su archiconocida y muy extensa «Memorias de Idhún», en la cual te describe hasta el musgo de las piedras del lecho del riachuelo del jardín…
Otro de los aspectos que me resultó extraño fue que la definición del carácter de los personajes es muy escasa, lo deja todo como muy en vilo, sin dar explicaciones que resultan bastante necesarias para mantener equilibrada la intriga. Hay pocos personajes, algunos con apariciones bastante efímeras y que tardan en cobrar sentido… no sé, me dejó una sensación como de que intenta crear una atmósfera de misterio y misticismo, pero que esa atmósfera no llega a tener verosimilitud por la falta de detalles y de riqueza descriptiva.
Quizás no para todos los lectores…
Siempre me ha gustado mucho cómo escribe Laura Gallego García, fue una de las autoras que marcó un antes y un después en mi vida como lectora con sus antes ya nombradas «Memorias de Idún». Supongo que habrá sido por el paso del tiempo, quizás porque me he terminado acostumbrando a otra clase de estilo, otros autores más por así decirlo «de adultos», pero ya no me fascina tanto como lo hizo cuando leí algunas de sus otras obras, las cuales me parecieron rebosantes de una magia inigualable.
Esta autora escribe orientando sus obras a un público juvenil, que es el que más se inclina por los temas de fantasía épica que son el centro de las tramas que idea, cosa que me parece más que admirable, pero por esa misma razón a mí, que he pasado prácticamente toda mi adolescencia «bebiendo» de su literatura, ahora se me queda corta, necesito cosas con algo más de densidad, más complejas, que estimulen mis ganas de conocer cosas nuevas… puede que tenga que admitir que, en ese sentido, la fantasía épica ya sólo puede proporcionarme una fuente de mero entretenimiento, y no de desarrollo personal en lo que a literatura se refiere.
En mi opinión
En conclusión, debido a la densidad que busco en una obra puedo decir que este libro me ha pillado un poco crecidita, pensé que me iba a gustar bastante más, pero desde luego lo recomiendo como un posible regalo para lectores juveniles, sobre todo a quienes les guste la fantasía y las aventuras, porque desde luego en este libro de eso no falta…
